El pasado viernes, el alcalde y los concejales de Temuco otorgaron al Cuerpo de Bomberos de la ciudad un reconocimiento como Institución Destacada en el marco del aniversario 136 de la comuna.
La institución atiende a la capital regional, Padre Las Casas, Vilcún y Freire, cuenta con 12 compañías, dos brigadas y con más de 700 bomberos que desde las pasadas elecciones de diciembre se encuentran al mando del comandante Claudio Magofke Rodríguez, que estará durante el período 2017 y 2018.
EL COMANDANTE
Magofke tenía 20 años cuando un amigo lo invitó a participar de un servicio de rescate vehicular de bomberos.
Un episodio que, según cuenta, lo cautivó y lo llevó a ingresar como aspirante a la Tercera Compañía de Bomberos de Temuco, en la que se encuentra pronto a cumplir 23 años de servicio.
Fue el único aspirante que ingresó a su compañía en el año 1994, por lo que pudo aprender directamente las enseñanzas de los bomberos más antiguos, y se llevó una sorpresa cuando descubrió que su bisabuelo, Enrique Magofke, también había formado parte de su compañía en la década de 1920.
Tiene 43 años, estudió Construcción Civil en la Universidad de La Frontera, está casado con tres hijos y como bombero se ha desempeñado en diversos cargos, entre los que destacan el de capitán de compañía, en el que se mantuvo por ocho años; y también fue segundo comandante por dos años.
¿Qué significa para usted haber sido nombrado comandante?
Estar en la primera autoridad al mando activo como comandante es un gran desafío y una gran responsabilidad, porque se debe dar el ejemplo y procurar ser un buen líder. Es un orgullo y una felicidad tremenda que se debe cuidar, creo que todos los cargos tenemos el desafío de dejar un sello en temas de empatía y la forma de lograr los objetivos. El desafío principal es que no nos gane el día a día, ser capaces de ver nuestro horizonte e ir cumpliendo cada una de las metas a corto y mediano plazo.
¿Cuáles son los principales valores que tiene esta institución?
Hay principios del orden, de la ética, de la moral, que están muy marcados en la institución y nos permiten sustentarla junto con las tradiciones, la historia y la disciplina desde el año 1851. Todo lo demás se puede educar con ejercicios, con capacitación, pero en definitiva estos valores ayudan a prestar servicio, al cual uno se une de forma voluntaria y tiene muchas obligaciones, derechos, deberes y responsabilidades. Por ejemplo, la guardia nocturna está 8 horas, todas las noches, 365 días del año en las 12 compañías y las dos brigadas, dando una tranquilidad a la ciudadanía, con el fin de poder estar prestos a cualquier emergencia.
¿Qué es lo mejor que le ha entregado el ser bombero?
Lo más importante que me ha tocado vivir es poder desarrollar dos agendas en paralelo, porque todos los bomberos trabajamos o estudiamos y tenemos que cuidar la escala de valores entre familia, estudio o trabajo y servicio. Si los dos primeros se llevan de buena forma, creo que se logra ser un excelente bombero. Destaco los valores, la capacidad de elegirnos entre nosotros de forma democrática y de respetar fuertemente nuestras tradiciones. Además, el apoyo que tenemos de nuestras familias es esencial y nos da la fuerza para poder participar en la institución. Estoy muy orgulloso de pertenecer a bomberos, es una institución que permite pasarlo muy bien pero que también tiene grandes responsabilidades.
¿Cuáles son las experiencias más emocionantes que le ha tocado vivir ?
Una de las emergencias más importantes de las que me ha tocado participar fue en el accidente de las temporeras entre Pitrufquén y Gorbea, donde habían 14 fallecidos. Fueron imágenes muy fuertes, yo era teniente cuarto nuevo en el cargo y me tocó dirigir la emergencia por parte de mi compañía. Uno se queda con el sufrimiento de las familias, pero con el grato término de haber salvado las vidas de otras personas involucradas. Esas satisfacciones son las que nos llenan de orgullo, el reconocimiento y las gracias que nos da la gente.
¿Cómo se aprende a controlar la adrenalina que generan estas situaciones de emergencia?
Somos profesionales y estamos para solucionar un problema y no para agrandarlo, por lo que la adrenalina se tiene que ir manejando con el tiempo. Se aprende participando en los ejercicios y es mucho lo que te entrega la sabiduría de los más antiguos. Al entrar en la vida de cuartel, uno se impregna de la historia de Bomberos, la internaliza como propia y la proyecta para poder traspasarlas a las nuevas generaciones.
¿Cuál es su opinión del debate que existe sobre dar o no sueldos a Bomberos?
Cuando entramos como cualquier persona civil, desconocemos toda esta mística, tradiciones e historia que los más antiguos nos entregan. Somos voluntarios para ingresar, pero estamos llamados cada día a ser profesionales. La historia y la tradición nos mantiene en fila, sin aspirar a ninguna cosa más que a servir e incluso dar la vida por ello. Ese es nuestro sueldo: la garra que nos hace ingresar a Bomberos y permanecer ahí con todas las restricciones y exigencias que tiene. Lo que Bomberos necesita es que el Estado entregue las herramientas para contar con protección personal, material mayor y capacitación.
El Cuerpo de Bomberos de Temuco tiene 118 años y presta apoyo a Padre Las Casas, Vilcún y Freire. Contiene 27 carros bomba, una ambulancia y una unidad de grupos de rescate subacuático en 12 compañías y 2 brigadas. Existen 720 bomberos en servicio, de los cuales el 15% son mujeres. El comandante indicó que la institución se encuentra en una etapa de modernización gracias a las nuevas tecnologías y espera incrementar sus fuerzas en un 10% este año, y agregó que en marzo se abren los cuarteles para los cursos de aspirantes y cadetes. Además, el bombero destacó la gestión de los concejales de las cuatro comunas en los aportes de los alcaldes al Cuerpo de Bomberos, el reconocimiento de la comunidad y el apoyo de los medios de comunicación.
Entrevista de Consuelo Kehr, Diario Austral de La Araucanía, 26 febrero 2017.